Los ladrillos de Laurel Mullite son materiales refractarios excepcionales. Con mullita como componente principal y gracias a su alto punto de fusión, poseen una excelente resistencia a altas temperaturas y pueden operar de forma estable en entornos de alta temperatura de 1600 °C a 1700 °C. Su estructura densa les confiere una alta resistencia mecánica y una excelente capacidad de compresión y flexión, lo que les permite soportar eficazmente altas presiones e impactos. Asimismo, presentan una buena resistencia al choque térmico, manteniendo su estabilidad frente a cambios bruscos de temperatura y sin propensión a agrietarse ni desconcharse. Además, poseen una gran estabilidad química y resisten la erosión de la mayoría de las escorias ácidas y alcalinas, así como de los metales fundidos. En hornos de alta temperatura de diversas industrias, como la metalurgia, el vidrio, la cerámica y la energía, se utilizan a menudo como materiales de revestimiento para garantizar el funcionamiento normal y la eficiencia de producción de los hornos.